La escuela de natación con acompañante surge de la necesidad de generar un espacio de enseñanza aprendizaje del deporte para niños que padecen patologías mentales como pueden ser Retrasos Madurativos, Trastornos del Espectro Autista, etc. que desean acceder a la práctica.
Como la natación es un deporte integral al que todos pueden acceder, estos niños podrán realizar la práctica sustentándose del apoyo de un “acompañante” que no necesariamente tiene que tener el título de tal (puede ser un familiar)
La clase se realiza en pileta de 20 metros, con actividades de enseñanza que se adaptan a las cualidades de cada niño, coordinadas por un profesor a cargo, quien fija los objetivos y lineamientos de trabajo diario. Se los trasmitirán al acompañante, en caso de que el mismo no tenga las aptitudes para la comprensión de las consignas, y se supervisa constantemente en el trascurso de la clase.
Condiciones para acceder
Puede realizar esta actividad cualquier niño que tenga capacidades diferentes, con una persona que lo acompañe dentro y fuera del agua (es decir, en el vestuario, en pasillos y durante la actividad), que sea responsable de velar por su cuidado.
